PESIMISMO REGIONAL

(Fuente: Vegamediapress)

El diario progubernamental, LA VERDAD, publica hoy martes, un amplio informe de la progubernamental CROEM, el organismo oficial de los empresarios murcianos instalados en el poder económico, en el que da una serie de datos altamente negativos sobre la situación económica, social y laboral de la Región de Murcia. El periódico, en primera pagina, titula a cinco columnas lo siguiente: “CROEM ALERTA DE QUE YA ES NULO EL CRECIMIENTO REGIONAL. La Patronal cree insuficientes los planes de inversión de la Comunidad”.

Este despliegue informativo de dos órganos murcianos que siempre han apoyado a Ramón Luís Valcárcel, y su Gobierno desorientado, es o son un claro síntoma de que la crisis murciana, la más alta de todas las comunidades españolas, ha entrado en un franco proceso de recesión, por lo que la alarma de los poderes económicos y financieros están al máximo, salvo los sindicatos que ni actúan ni dicen nada salvo cuando se les pregunta.Es evidente que la política económica del Partido Popular y su gobierno fantasma constituye un problema que vamos a pagar los ciudadanos de esta provincia que se debate entre la angustia y la desolación. Si además sumamos el elevado número de trabajadores en paro, de los más altos de España, y unos salarios también, comparativamente hablando, de los más bajos junto con una inflación que pone los precios por las nubes.

La política del gobierno regional, que solo aposto por el ladrillo, y en segundo termino por un turismo en franco retroceso y de segunda fila, merece un debate urgente en la Asamblea Regional. Y no vale para nada excusas de que si estamos de vacaciones o si no es el momento apropiado.Naturalmente esta cadena de datos negativos se suman a los otros datos macronacionales que han nacido de la política destructiva del Gobierno de Zapatero. La ceguera de Madrid, y el engaño a los españoles durante la campaña electoral, merecen la condena de la opinión publica que vive momentos de preocupación que irán aumentando en los meses próximos, y que puede estallar en una revuelta social.

Finalmente, a todo ello hay que sumar la situación de extrema necesidad de una población de inmigrantes, que añade incluso dramatismo. Esperemos que estos vaticinios se frenen y con la ayuda de todos los segmentos sociales y económicos, salgamos de esta recesión altamente preocupante, si ponemos inteligencia, altas dosis de sacrificio y pactamos acuerdos de Estado.